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sábado, 2 de octubre de 2010

La CITA de la semana.



He encontrado esta frase en el blog de una amiga. Me ha parecido muy sensata.

He estado tratando de pensar en una tradición que merezca seguir celebrandose y no la he encontrado. Seguro que las habrá. Como no sea echar un chorrito de anís a un botijo nuevo para eliminar el sabor a barro... claro que eso más bien es un truco de la sabiduría popular. No se me ocurre ninguna.

Sed, por Bouguereau

Lo que acaba con las tradiciones es el progreso. Progresar es avanzar. Por lo tanto, las tradiciones, mal que les pese a muchos, están destinadas a desaparecer. Eso significará que hemos progresado.

¿Había una tradición más importante para los británicos que la caza del zorro? Se acabó con ella. Eso es progresar y evolucionar.


¿Alguien echa de menos el derecho de pernada? Era una tradición.  Hoy sería inconcebible.


Otra antiquísima y terrible tradición es la de vendarse los pies en China. Aún no totalmente desaparecida.




Maurice Ravel fué audaz en su época con su música. Lo fué debido a su mente progresista.

Maurice Ravel

2 comentarios:

  1. Yo no acabo de entender la supuesta legalidad de ciertas tradiciones o costumbres, por el mero hecho usarlas repetidamente a lo largo del tiempo. Como bien dices, el progreso es la mejor arma para acabar con la sinrazón de muchos hábitos, por crueles además de inútiles, pero aún es necesario un mayor esfuerzo para terminar con prácticas que todavía se escudan tras la consabida frase “siempre se ha hecho”. Hace falta incidir en la educación o, dada la tozudez de algunos, hacerles ver si les gustaría ser protagonista de alguna “bonita” tradición.
    Por cierto, nunca había visto un pie deformado…uuuyyy.
    Un abrazo y feliz sábado.

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  2. Hola Llonxana.

    Parece como si cualquier barbarie se pudiera perpretar amparandose en la tradición. El problema es que esta clase de gente carece totalmente de sensibilidad y una mínima empatía hacia los animales. Es gente primitiva.

    Estoy seguro de que todo es cuestión de tiempo. Espero que de poco tiempo.

    Lo de los pies vendados de las chinas, es espeluznante si lees todo el proceso. Otra más de las terribles tradiciones que no se pueden justificar.

    Gracias Llonxana.

    Un beso.

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