En 1931 James Whale rodó Frankenstein. basada en la genial novela de Mary W. Shelley. La composición que Whale creó del monstruo, interpretado por Boris Karloff, ha pasado a la historia, como uno de los mayores iconos del cine. La película, aunque no es muy fiel a la novela, tiene un enorme valor cinematográfico. Logró un enorme éxito. Tanto, que en 1935 Whale rodó La novia de Frankenstein, considerada por parte de la crítica (nunca he entendido a quién le puede importar lo que piense un crítico), incluso mejor que su predecesora Frankenstein.
La novia de Frankenstein volvía a estar protagonizada por Boris Karloff. Esta vez, con el genial flequillo, chamuscado por el incendio que debería haber terminado con él, al final de Frankenstein.
El papel de la novia, lo interpretó la maravillosa Elsa Lanchester. Logrando, su personaje, como el de Frankenstein, convertirse en un icono de la historia del cine. Curiosamente, también el personaje de Mary Shelley, también está interpretado por ella.
A mí de pequeño, su aspecto y su peinado me marcaron
Impresionante imagen.
¿Como no dejarme impresionar, siendo un niño?
En realidad, me marcaron terriblemente
los personajes de las dos criaturas.
Una de las cosas que me gustan de esta película es justo el tercer plano nada más comenzar. Después del primer plano del exterior de un castillo demasiado gótico y siniestro para lo que en realidad era Villa Diodati, el lugar donde comenzó a escribir Mary Shelley su novela. Tenía sólo 18 años.
Villa Diodati
Villa Diodati en la película.
Supongo que había que motivar al público
para asustarle desde el principio.
Después de un corto plano del exterior de la ventana, desde donde podemos ver el interior de un salón con tres personas a la luz de las velas y la chimenea, estas son Lord Byron, Percy Shelley y Mary Shelley. Prescindieron de Polidori, aunque, sólo por escribir El vampiro, debería no haber sido así. De hecho, Mary Shelley y Polidori, fueron los únicos que llevaron a cabo la propuesta de Lord Byron de escribir cada uno una historia de terror, para mantenerse ocupados debido al terrible clima tormentoso en Suiza en esos dias. Tal vez, Polidori, estaría en el baño. O llorando en su cuarto, humillado, otra vez, por Byron.
Es en el siguiente plano, cuando vemos el interior del gran salón con los tres personajes al fondo de este, cerca de la chimenea. Una O'connor, interpretando a la sirvienta, cruza el plano, saliendo del salón con cuatro Borzois.
Buena manera de comenzar una película. Siembre pego un bote (cosas mías), cuando veo aparecer un galgo o un Borzoi en el cine.
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