Hace poco compré en un "Todo a 100", una mesita auxiliar que viene desmontada en una pequeña caja. Creo que me costó 7€. Me fuí a casa tan contento, pensando en hacer algo con ella. Y preocupado, pensando en que mi hermano me echaría la bronca por meter más trastos en casa.
La lijé entera, pieza por pieza, antes de encolarla.
Encolé el papel de las rosas en la mesita, después la mariposa y barnicé todo.
Pero antes, había decorado la mariposa con pintura dorada, lentejuelas y escarcha, también dorada.
Fotografiada con flash
Y sin flash
Se aprecian más los brillos del oro.
La parte superior, ya terminada.
Mientras, Lolita y Tallulah,
me acompañan en el salón-taller.
Lolita
Tallulah, llena de pelo.
Tanto pelo y tan finísimo,
que siempre encuentro alguno debajo de una capa
de barníz. Es inevitable, pués flotan en el aire.
Dentro de trescientos años, cuando algún anticuario
observe esta mesita o cualquier otro mueble
de los que decoro, pensará que lo hizo
una anciana con un moño muy descontrolado.
Y si lo analizan, descubrirán
que ese artesano con gustos tan peculiares
y que lo llenaba todo de borlas,
trabajaba con la compañía de su borzoi.
¿No es emocionante?
La mesita, ya colocada en su posible lugar.
La columna de la pared, me la encontré en la calle.
Como estaba rota, sin base, la colgué en la paréd,
después de pintarla y darle betún de judea.
Sólo falta una taza de té.
Y como si no fuera posible evitarlo,
le he colocado una borla granate entre las patas.
Con una planta y un galgo, en lugar de la vela.
Bueno, que maravilla una vez mas.
ResponderEliminarYo aun tengo a medias mi columna , ya pintada d rojo y dorado y con las laminas prerrafaelitas esperando para ser pegadas... a ver cuando me pongo a ello.
Hoy hace un mes que Syra está conmigo, cada dia nos queremos mas :)
Gracias por decirme que te gusta, SILVIBILL.
ResponderEliminarY termina tu columna y me la enseñas. Ok?
Me alegra muchísimo que me digas que Syra y tú, cada día os quereis más. Me hace muy felíz. Me alegro mucho por las dos.¡Y ponle un collar seguro!
Besos para las dos.
Mirala en su facebook, ya tiene 4 collares a falta de uno!
ResponderEliminarViste las preciosas ilustraciones de Arturo Elena? tambien hay una con borzois
¡Si le dijeran al galguero cabrón que la abandonó, que ella tiene Facebook! ¡Que le jodan!
ResponderEliminarTe contesté el email anoche.¿¡Tiene una ilustración con borzois!? Voy a buscarla.
Gracias y besos.
¡Ya la tengo! Gracias.
ResponderEliminarCuanto admiro tu imaginacion y tu iniciativa para ir haciendo cosas bonitas con lo que vas encontrando, en un chino, o incomprensiblemente tirado en la calle. Siempre me gustan un monton tus entradas sobre tus restauraciones...con su borlita roja, que no falte!
ResponderEliminarBesotes, Eva.
Me ha encantado lo que has hecho con la mesa, así te digo que si veo una parecida en el chino me la llevo a casa, porque a mí también me gusta mucho pintar muebles, restaurarlos, empapelarlos...
ResponderEliminarYo no tengo en casa ninguna alfombra, y eso que me gustan, pero son incompatibles con los pelos de Nana. No te quejes de Talulah, que no sabes lo que es una labradora!! hay pelos por todas partes.
Y, me alegro un montón de lo de Syra.
Muchos besos!
¡Me encanta!, aunque yo personalmente no hubiera añadido la mariposa, las rosas hacen un efecto precioso por si solas.
ResponderEliminarY sigo diciendo que me encanta también tu casa lo poquito que veo en las fotos, ¡que envidia te tengo!. Y también me dais envidia vosotros por esos amigos perrunos que teneis. Ayy si la envidia fuese dinero sería rica, jajaja.
Un besazo Alberto.
EVA ANONIMA:
ResponderEliminarMuchas gracias. Yo admiro, odio y envídio, a la gente que tienen casas grandes ¡No tengo sitio para más muebles decorados o sin decorar! Hace unas semanas me encontré en la calle el mueble de un reloj de pié enorme y precioso, aunque sin el reloj. No me lo llevé, por no saber donde meterlo. Cuando me arrepentí, ya se lo habían llevado. Algún cabrón que se quiso poner creativo :) Lo habría convertido en una preciosa vitrina. Llevo, desde entonces, dándome de bofetadas por no llevarmelo. No lo olvido.
Lo de las borlas, se ha convertido en una especie de firma personal. Cuando me pongo a pintar un mueble, Oliver siempre me dice: "¿Y donde piensas poner las borlas ahí?"
Un beso, guapa.
LAURA:
ResponderEliminarYo siempre tiendo al exceso. Mi casa está llena de exceso y de abigarramiento. Sin la mariposa, me parecía muy bonita, pero pensé que le faltaba el toque excesivo. Habría quedado más "fina", pero yo no soy tan fino. Por eso me complico la labor añadiendo cosas que normalmente, para los demás, sobran. ¡Que le voy a hacer!
Y no me tengas tanta envídia. En las fotos, no muestro el desorden que tengo en el resto del salón. Aunque no sé por qué lo cuento.
Yo también tendría esa envídia si no viera a mis galgas ahora dormidas a mi lado.
Muchas gracias y besos.
¡Me he equivocado! El comentario anterior, iba dirigido a SARA. Deben ser los efectos del barníz, perdonarme.
ResponderEliminarAhora sí, LAURA:
ResponderEliminarBusca en los chinos, que seguro que la encuentras.
A mí me gustan los suelos alfombrados. El salón parece un serrallo. Además, los suelos de mi casa son de baldosas muy antigüas y así las oculto. Tú no sabes como pone Tallulah de pelos las alfombras. Yo ya me resigno. Cuando paso el aspirador, hasta se reaviva el color. Y cuesta mucho sacarlos.
Todos nos alegramos de lo de Syra.
Muchas gracias.
Un beso.
¡Qué gusto me da ver las cosas que haces! Me maravillo ante las habilidades manuales de la gente, será porque soy una auténtica inútil, jajaja. Te ha quedado preciosa.
ResponderEliminarBesitos
Isabelnotebook
ISABEL:
ResponderEliminarNo te dejes impresionar. No es para tanto. Y seguro que tú no tienes habilidades manuales, por que no te pones a ello. Te sorprenderías de lo que eres capáz, si agarraras un taburete y unos botes de pintura. De todas formas, estoy seguro de que existen multitúz de cosas que yo me siento incapáz de realizar y para tí serán como coser y cantar.
Tengo muy abandonados los blogs amigos. veo tus posts, pero dejo el comentario para otro momento que no llega. Me siento avergonzado. Mucho. Intentaré remediarlo pronto.
Muchas gracias por tus palabras que no merezco.
Un beso.